Miedo a la libertad, pavor a Internet

La izquierda teme a la libertad y empieza a ver como empieza a perder la aplastante mayoría mediatica con la que contaba gracias a sus buenos apoyos en el panorama mediatico-empresarial. Pero en Internet eso no vale. Internet y el fenómeno blog han democratizado la opinión haciendo posible que todo tipo de ideas lleguen a todo el mundo sin posibilidad de censura, al menos hasta ahora.

Y es que en el soporte donde los amos mediáticos tienen menos capacidad de influencia la derecha gana la batalla. Tenemos varios ejemplos de esa supremacía. El primero es el portal de información libertaddigital.com que se esta acercando a los dos millones de lectores, también tenemos al blog de los enigmas de 11-M que ha conseguido impulsar una autentica reacción social por la exigencia de la verdad y por último tenemos a la blogosfera ANTIZP que cuenta con cientos de blogs capaces de hacer llegar una creciente opinión de descontento con el gobierno.

Como la discrepancia molesta a los totalitarios, Fernando Moraleda esta impulsando la Ley de Impulso de la Sociedad de la Información que permite a organismos administrativos cerrar sitios web sin necesidad de sentencia judicial. Es el espirito del CAC llevado a la red.

Lo mejor de todo esto será ver a los que se dicen progresistas recitando lemas como libertad o pluralidad a la vez que defienden organismos como el CAC o esta ley. Y es que para la izquierda la libertad es solo una consigna que usarán en su provecho para, una vez cumplidos sus propósitos, tirar a la basura

Milagro de navidad

Tras tantas malas noticias para Parrilla y Celestino por fin ha llegado una buena nueva. El sindicato policial CEP ha conseguido recaudar los 300.000 euros de sus fianzas. Estos dos policías honrados que fueron encarcelados porque se atrevieron a denunciar la mafia de la goma-2 eco pasarán la navidad en casa. Este es el milagro de navidad hecho realidad por la magia de la sociedad española que ha sabido responder al gesto heroico de Parrilla que se había negado a salir de la cárcel si no era con su compañero.

Mi primer deseo para el año nuevo es que este milagro de navidad ayude a más gente a dar el paso para que el próximo año ya no necesitemos volver a pedir el esclarecimiento del 11-m a un gobierno que siente alergia contra la reacción cívica española cuyo primer deseo es la verdad.

Cortesía e-pe:

Actualizado: Veo hoy en EL MUNDO que todo ha sido posible gracias a la contribución de setenta mil euros por parte de un empresario. No tengo palabras para elogiar a esta persona ni a las otras 5.000 que incluso desde fuera de España hicieron posible un final feliz para este cuento de navidad.

Acabando con el estado de derecho.

Volvemos a ver dos nuevos episodios de ese estado policial del que muy acertadamente hablaba Zaplana. Un estado policial que usa todos los medios a su alcance para acosar a todo funcionario honrado que quiere ayudar a despejar las dudas sobre el 11-M y por otro lado una nueva contraprogramación de Rubalcaba para ocultar la realidad sobre el rearme de ETA.

Lo primero lo digo a raíz de la noticia aparecida ayer sobre la suspensión de empleo y sueldo a dos policías honrados detenidos solo por reunirse con un periodista. No deja de llamar la atención que un gobierno actúe de manera tan totalitaria contra los que se reunen con la prensa independiente mientras no toman ninguna medida contra los agentes condenados por la detención ilegal de dos afiliados del Partido Popular. No creo que me arriesgue mucho si digo que a estos dos les ascenderían si no les hubiesen pillado.

Además el gobierno que ya nos tenía acostumbrados a episodios de contraprogramación para tapar sus escándalos, ya que parece que la Operación Malaya no da mucho más de si ni tampoco ha llegado el momento de detener a la Pantoja, ha decidido contraprogramar la aparición de un zulo etarra de reciente construcción con el hallazgo de otro abandonado.

Es la política del PSOE que no es más que una empresa que se financia del adoctrinamiento usando para ello todos sus resortes en el estado al que se han empeñado en convertir en un estado policial. Donde se lincha a los funcionarios honrados y se lanzan cortinas de humo para tratar de ocultar las actividades de los terroristas. Es la España del socialismo, la España del "cambio" que tanto pregonaban quienes le votaron.